Los textos argumentativos son los más usados en general, también son claves en la publicidad y el marketing. En estos se expresan ideas, opiniones o una postura sobre un tema en particular. Como redactora experta quiero explicarte en detalle qué son los textos argumentativos, sus características, tipos, usos y más. ¡Sigue leyendo para saber más!
Tabla de contenidos
¿Qué son los textos argumentativos?
Un texto argumentativo es un texto redactado para expresar opiniones, ideas o posturas sobre un tema específico. El objetivo es persuadir a la audiencia a través de argumentos, hechos y evidencias que demuestren un punto de vista y convenzan al lector.
En el marketing, los textos argumentativos buscan convencer al lector de realizar una acción, bien sea comprar un producto, contratar un servicio, suscribirse, descargar un producto. Pero no se persuade al potencial cliente sin argumentos, de ahí la importancia de una buena base.
En este tipo de textos, el punto de vista se expresa desde el inicio y en el resto del texto se defiende con argumentos, y se cierra con una conclusión.
Características principales de los textos argumentativos
- Tienen un propósito comunicativo, es decir, transmite una opinión, mensaje o idea.
- Deben tener una idea principal, que después se desarrolla en el texto.
- Tienen una intensión persuasiva.
- Se da una sensación de imparcialidad.
- Se expresa cierto conocimiento para razonar un punto de vista.
- El objetivo es demostrar la validez de una opinión o idea.
- Se presentan ideas, argumentos o datos de forma coherente.
- Se usa primera persona del singular, para indicar imparcialidad.
Importancia
Los textos argumentativos son importantes en caso de necesitar defender ideas y creencias de forma clara. También sirven para persuadir a los demás, demostrando nuestro punto de vista.
Este tipo de textos permiten expresar opiniones de forma razonada y fundamentada, con argumentos sólidos y ejemplos. Asimismo, permite desarrollar el pensamiento crítico, tanto al escribir como al leerlos.
Técnicas de argumentación
Usar las técnicas de argumentación correctas es clave para poder defender tus ideas en el texto, persuadir a los demás y lograr tus objetivos.
Tipos de argumentos
- Lógicos: con este tipo de argumentos se apela a la lógica, demostrando causa-consecuencia con fundamentos. Se deben usar datos, estadísticas, estudios científicos o ejemplos.
- Emocionales: estos argumentos buscan conectar con los sentimientos del público, puede ser empatía, compasión, miedo. Se utilizan historias, anécdotas o figuras literarias.
- Demostrar autoridad o credibilidad: en los textos con este tipo de argumentos se busca establecer autoridad y credibilidad del autor para demostrar su posición. Se mencionan las credenciales, experiencia o estudios.
- Ilustrativo: son argumentos con hechos y ejemplos, se usa un lenguaje claro y conciso. Se pueden emplear gráficos o imágenes, además de un tono de voz convincente.
Estructura de un texto argumentativo
Un texto argumentativo se estructura de la siguiente forma:
Introducción
Cualquier texto argumentativo debe tener una introducción que discuta la relevancia del tema, esta incluye como parte más importante la tesis. En la introducción se revisa el tema general.
En la introducción hay dos recursos muy usados, se hace una pregunta al lector o se muestra una estadística con data relevante. Usar citas, hacer alusiones, emplear datos y ejemplos funcionan muy bien para captar la atención de los lectores.
Además, en la introducción siempre debe quedar clara la tesis, es decir, la idea y punto de vista que deseas defender a través de tus argumentos.
Cuerpo o desarrollo
Los párrafos del cuerpo de texto servirán para discutir las diferentes aristas del tema. En este se debe incluir información de antecedentes, evidencia y argumentos.
En esta parte presentarás el argumento que respalde la tesis que mencionaste en la introducción. Puedes hacer analogías, demostrar autoridad, causa-consecuencia o lógica, e ilustrativo, es decir, con ejemplos.
Conclusión
La última parte sería la conclusión, que da un resumen de las ideas presentadas y vuelve a exponer la tesis. En esta parte se busca reforzar el punto de vista principal que mencionaste al principio.
En los textos de marketing, hechos por un redactor SEO, en la conclusión se busca terminar de convencer al lector de llevar a cabo una acción, como comprar, descargar, registrarse.
Tipos de textos argumentativos
Clasificamos los textos argumentativos según la intención del autor y del ámbito de uso así:
Según la intención del autor
- Persuasivos: se escriben estos textos con el objetivo de convencer al lector para que adopte un punto de vista o realice una acción. Son comunes en publicidad, propaganda y marketing.
- Convincentes: aportan pruebas y argumentos claros para respaldar una idea o teoría. Son textos que se hacen con el fin de convencer al lector de una verdad, se usa lenguaje claro y objetivo. Son más comunes en ámbitos académicos, jurídicos y científicos.
- Demostrativos: como su nombre lo indica, con estos textos el autor busca demostrar un punto de forma clara y detallada. Su objetivo es informar, educar o entretener. Se usan principalmente en manuales, artículos y textos académicos.
Según el ámbito de uso
- Académicos: este tipo de textos argumentativos se usa con el fin de presentar teorías, investigaciones o análisis de un tema. Su lenguaje es más formal y estructurado, citan referencias.
- Periodísticos: son los artículos de opinión, editoriales y columnas que vemos en los medios de comunicación. Tienen como objetivo expresar la opinión del autor sobre un tema, emplean un lenguaje claro y directo.
- Jurídicos: son usados para temas judiciales, como sentencias, demandas y otros. Se usan para defender una posición legal, usan lenguaje formal.
- Publicitarios: en la publicidad son comunes los textos argumentativos, ya que buscan persuadir al consumidor a que compre un producto o servicio. El lenguaje normalmente es exagerado, repetitivo y emocional, puesto que así captan la atención.
Un texto argumentativo puede pertenecer a más de un tipo.
Consejos para escribir un buen texto argumentativo
Definir claramente la tesis
La tesis es clave en cualquier texto argumentativo, si no está claro o los lectores no la entienden fácilmente, no tendrás el resultado deseado. Asegúrate siempre de que tu tesis sea fácil de encontrar, normalmente debe estar en el primer párrafo, en la primera o la última oración llama más la atención.
En tu tesis debe quedar claro de qué lado del argumento estás, es decir, tu posición en el tema.
Utilizar argumentos sólidos y convincentes
Recuerda que no será un texto argumentativo si no tiene argumentos y evidencias sólidas. Debes mostrar datos que respalden tu idea. Como estudios previos, encuestas, data y más.
Los argumentos permitirán que tu texto sea más confiable.
Estructurar el texto de forma lógica y coherente
Arriba mencionamos cómo debía ser la estructura de un texto argumentativo, es importante cumplir con esta. La introducción lógicamente debe tener tu punto de vista sobre el tema y lo que esperará el lector.
En el cuerpo de texto debes ser coherente y demostrar con argumentos esa tesis, dejarle claro al lector con hechos, citas, referencias, tu punto de vista.
La conclusión también debe dejar claro tu punto de vista y, en el caso del marketing, indicar la acción que deseas que lleven a cabo los clientes.
Utilizar un lenguaje claro y preciso
Dependiendo del tipo de texto argumentativo, podrías utilizar distintos tipos de lenguaje, como formal, casual, exagerado…, pero siempre debes hacerlo utilizando las palabras de forma clara y precisa, para dejar evidente tu argumento.
A menos que se trate de un texto argumentativo académico o jurídico, el uso de palabras técnicas se debe evitar. Es preferible emplear un vocabulario sencillo y comprensible.
Se deben evitar las ambigüedades, expresando claramente las ideas; asimismo, usar ejemplos concretos.
Revisar y corregir el texto cuidadosamente
Como con cualquier texto, después que redactes el primer borrador de tu texto argumentativo deberás revisarlo para evitar errores gramaticales y de sintaxis.
Si es posible permite que otros lean tu texto, así podrás comprobar que tu argumento queda claro y que no haya ningún error en la redacción.
Errores comunes a evitar en los textos argumentativos
- No organizar el texto antes de escribir. Como mencionamos antes, una buena estructura es clave para un buen texto argumentativo, empieza con un borrador antes de desarrollarlo.
- No tener una sentencia o tesis. Un texto argumentativo habla a favor o en contra de una idea, la tesis es la base para que el contenido sea lógico y consistente, así podrás alinear tu argumento.
- No dar suficientes argumentos. En el desarrollo de tu texto debes dar argumentos sobre tu tesis, no dar suficiente información de respaldo es un error común.
- Usar fuentes irrelevantes, desactualizadas o poco creíbles. La data te ayuda a demostrar un argumento, si las fuentes no tienen credibilidad tu texto también carecerá de esta.
- No incluir ejemplos. Un texto argumentativo sin ejemplos no ilustra tu punto de vista ni apoya tu idea. Escribe historias creíbles y usa hechos reales.
- Copiar contenido. El texto argumentativo debe ser original, libre de plagio, se pueden utilizar argumentos de otros como respaldo al tuyo, pero siempre citándolos.
En resumen, los textos argumentativos son una herramienta esencial para la comunicación humana, ya que nos permiten expresar nuestras ideas, defender nuestros puntos de vista y persuadir a los demás.
Un texto argumentativo bien escrito, con una redacción clara y concisa, es una buena herramienta académica, jurídica, periodística, y también de marketing digital.
Redactora, copywriter, especialista en temas SEO y de marketing digital, con 10 años de experiencia. Periodista de profesión. Jefa de Contenidos de Posicionamiento Web Systems.
