El proceso de migración de un website es tedioso, pero puede beneficiarlo a largo plazo. Por eso, en Posicionamiento Web Systems te explicamos cómo migrar tu web sin perder el posicionamiento. Requiere de la toma de decisiones, planificación y superar algunos retos técnicos.
Tabla de contenidos
¿Qué es la migración de un sitio web?
La migración web es un proceso por el que pasa una web con la meta de cambiar su configuración o tecnología. Se hacen cambios sustanciales que pueden afectar la visibilidad en los motores de búsqueda.
Una actualización no es una migración porque no hay grandes cambios en cuanto a plataforma, estructura, contenido, ubicación o diseño.
El concepto más limitado de migración web la define solo como cuando se cambia un dominio a otro. Pero actualmente también se dice migración al proceso de cambiar servidores, CMS, crear subdominios.
Existe un mito en el mundo del SEO que dice que cualquier proceso de migración implica una caída en el ranking, pero no siempre debe ser así. Si cambia un dominio por otro, sí suele suceder. En cambio, si solo cambias el diseño y lo haces bien no debería pasar.
Un ejemplo de migración web muy común es cuando pasas el dominio de HTTP a HTTPS. Con fines de mejorar la seguridad y el posicionamiento. Si no se hace bien puede tener efectos SEO.
La migración web en la mayoría de los casos se hace con el fin de resolver un problema, una necesidad, pero trae sus riesgos. Es un reto que requiere de ciertos conocimientos.
Razones para migrar tu web
Son varias las situaciones que requerirán la migración de tu sitio web, entre ellas:
- Cambiar el framework o CMS. Si tienes tu web hecha con una plataforma vieja podrías tener limitaciones con el diseño y optimización, lo que afecta a la audiencia. Un nuevo CMS podría ser la única respuesta para configurar y mejorar tu sitio de acuerdo a tus necesidades.
- Cambiar la estructura del sitio, navegación o diseño. Puede ser que necesites actualizar el sitio, mejorar su arquitectura, entre otros.
- Cambiar de HTTP a HTTPS. El protocolo de seguridad es importante, no solo para dar confianza, sino porque es un factor del ranking.
- Agregar una versión móvil de tu web. Mobile-first indexing es una realidad, si tu web no está optimizada perderás posiciones y tráfico. Es una medida que tiene un gran punto en cuanto a costo/beneficio.
- Moverte de servidor. Puede ser que tu hosting no te ofrezca un buen servicio, entonces la mejor opción es mejorarlo. Escoge el adecuado y hazlo siguiendo las recomendaciones.
- Cambiar el dominio. Si renombras tu negocio o marca lo recomendado es cambiar la URL. Es una decisión complicada.
¿Cómo es una migración web exitosa?
Una migración exitosa depende del tipo, los objetivos y los KPI que estás midiendo. Si se hace bien en la mayoría de los casos debe haber una pérdida mínima de visibilidad en las siguientes semanas.
Y luego la visibilidad debería crecer a largo plazo.
Tipos de migraciones web
En Moz, definen algunos tipos de migración web, dependiendo de dónde se hace, estos son:
- Cambios en la ubicación del sitio: cambio de dominio/rebranding; mover o unir partes de la web; de HTTP a HTTPS; mover sitios internacionales; cambiar la configuración móvil (AMP, PWA).
- Cambios de plataforma: moverla a la una nueva plataforma; mejorar la versión. Así como introducir nuevas características a la plataforma; integrar distintas plataformas.
- Cambios en el contenido: puede ser añadir o eliminar páginas. También añadir, eliminar o esconder contenido; consolidar páginas, contenido; introducir nuevos lenguajes o ubicaciones.
- Cambios estructurales: se refiere a cambios en la jerarquía del sitio, en la navegación. Del mismo modo, cambios en los enlaces internos, es el user journey.
- Cambios en el diseño y experiencia del usuario: son cambios para mejorar la usabilidad en distintos dispositivos, en cómo se ve una web. También cambios en los medio y desempeño.
Pueden haber migraciones que mezclan los distintos tipos que mencionamos arriba.
Cuando no hay un cambio en la URL, Google lo denomina traslados sin cambios en la URL. Por ejemplo, cuando cambias de hosting.
¿Cómo migrar tu web sin perder el posicionamiento?
Hay varios errores que te pueden llevar a tener problemas con tu migración web. Entre ellos no tener una estrategia clara, no planificar, no consultar con expertos SEO. También será un problema no tener los recursos o el presupuesto, no haber hecho pruebas, no resolver rápido los problema, entre otros.
Para evitar esto debes prepararte bien antes de comenzar la migración. Comienza por informar a tus usuarios que harás un mantenimiento, porque aunque hagas todo bien, siempre puede surgir algo y es mejor que tu audiencia lo sepa.
Otra recomendación es que no trates de migrar todo el sitio de una sola vez. Crea un ejemplo de la nueva web, mira que todo vaya bien y entonces ve migrando de a poco.
Evita hacer varios tipos de migraciones a la vez. Por ejemplo, si quieres cambiar el dominio, hosting y diseño web, haz una cosa a la vez. Así evitas mayores equivocaciones.
Podrás migrar tu web sin perder el posicionamiento si haces la migración en las horas de menos tráfico. Así minimizas el impacto si algo sale mal, también como hay menos tráfico el robot de Google te rastreará más rápido e indexará tu web nueva.
Haz pruebas
Una migración puede salir mal si no haces pruebas con tiempo, no querrás hacerlo muy rápido. Es un proceso que requiere coordinación de distintos equipos.
Por eso, lo mejor sería hacer una prueba con un subdominio o subdirectorio. Así saben si todos están coordinados. Si hay algún problema no se daña todo el sitio.
Si esto pasa es mejor retrasar el lanzamiento, identificar los puntos críticos y corregir.
Buena estrategia y planificación
Una estrategia hecha con objetivos pocos claros y realistas es menos probable que los lleve al éxito.
Tener objetivos medibles es clave en el mundo SEO. El principal debe ser la retención del tráfico actual y los niveles de ganancias. Incluso podría ser aumentarlos.
Planificar ayuda a evitar retrasos, aunque debes tener claro que las cosas pueden no salir como lo esperabas. Por eso también debes ser flexible, puede haber retrasos.
Evita hacer el cambio en tu web cerca de una temporada de altas ventas, porque si algo sale mal no tendrás tiempo de hacer rectificaciones.
La organización es clave en un proyecto de migración de una web.
Consulta un experto SEO
Cuando se hacen cambios de este sitio debes contar con la ayuda de expertos en posicionamiento web. Con estos podrás discutir las consecuencias de los cambios y cómo pueden contrarrestarlas.
Un experto SEO se asegurará de que la web sea rápida, limpia y más amigable. Te ayudará con las redirecciones, actualización del robots.txt, datos en Search Console y más.
Prepara bien las redirecciones
La implementación de las redirecciones es una de las actividades más importantes en las migraciones de sitios. Si la URL ya conocida deja de existir y no está bien hecha la redirección los rankings caerán.
Las redirecciones son importantes porque ayudan a los motores de búsqueda y a los usuarios a encontrar páginas que ya no existen, que han sido renombradas o movidas.
Si lo vemos desde el punto de vista SEO, las redirecciones 301 o de otro tipo, ayudan a los motores de búsqueda a descubrir e indexar las nuevas URL más rápido. También permiten entender cómo se asocian las páginas viejas con las nuevas. Esto hace que las señales del ranking pasen de las viejas a las nuevas, así el posicionamiento no cambiará.
Si la redirección se hace mal los usuarios podrían terminar en páginas de error 404 o entradas que no son relevantes para lo que buscaban. Lo que aumentará la tasa de rebote y al final afectará el SEO.
Una redirección mal hecha dejará de pasar las señales del ranking, significa que caerás y que tus resultados orgánicos también tendrán pérdidas.
El tipo de redirección recomendada es la 301 porque es permanente. Sirve para pasar de una versión vieja a una nueva; también si mueves el dominio o pasas de HTTP a HTTPS, incluso para reestructuraciones.
Las redirecciones 302 son temporales, solo se deben usar en situaciones que no necesitan de la permanente. Y no uses meta refresh o redirecciones JavaScript.
No olvides el mapeo de las URL para la redirección
Tienes que decirle a los motores de búsqueda que moviste tu sitio de una url a otra, necesitan las instrucciones del cambio de dirección. De otra forma, perderás la autoridad que has construido con los años, los rankings de palabras clave y más.
Toma cada URL de tu sitio y mapéala a su correspondiente URL nueva. Son dos columnas nada más.
Si has eliminado una URL no la envíes a la home. Prefiere enviar a los usuarios a páginas relevantes. Por ejemplo, si eliminas un post redirige al blog, a un post de temática similar.
Promociona la nueva URL de tu sitio, si la cambiaste
Durante y después de la migración debes informar en las redes sociales del cambio en la URL. Pueden contactar a las personas que enlazaron a la vieja URL y decirle que cambien el link a la nueva.
Igual si hiciste la redirección los links seguirán funcionando, pero se cree que se pierde algo de impacto y puede crear confusión en los usuarios.
Cambia los enlaces a tu web desde los perfiles de las redes sociales, también de las campañas publicitarias.
Después de la migración
Ya sabes que debes hacer una prueba antes de la migración. Cuando la estés haciendo debes subir el nuevo sitemap a Search Console, indicar el dominio preferido, entre otros aspectos. Envía un cambio de dirección.
Después de la migración mantente atento a Google Search Console para ver que esté rastreando las nuevas páginas. Ve si hay cualquier error de rastreo. Mide la velocidad de carga.
Google recomienda usar Search Console para revisar el tráfico de tu sitio luego de la migración.
Evita estos errores al hacer migraciones de sitios web
- Cambios en las etiquetas canonicalizadas.
- Contenido no indexable o bloqueado por el archivo robots.txt.
- Pérdida de metadatos (title y meta descripción). Screaming Frog te ayudará a analizar toda tu web y ver si perdiste alguna información.
- Pérdida de la velocidad de carga. Revisa esto con Page Speed Insights de Google.
- Problemas con los enlaces internos. Asegúrate que todos los links internos enlacen a la nueva URL.
- Error en las imágenes. Asegúrate que las URL de las imágenes enlazan a las correctas y al nuevo dominio.
- Redirecciones incorrectas.
Siguiendo estos consejos sobre cómo migrar tu web sin perder el posicionamiento te ayudarán a hacer bien esta tarea que puede resultar inevitable en algún momento. Si necesitas ayuda contáctanos, somos expertos SEO.
Redactora, copywriter, especialista en temas SEO y de marketing digital, con 10 años de experiencia. Periodista de profesión. Jefa de Contenidos de Posicionamiento Web Systems.